La desidia del Ministerio Público para investigar una denuncia por amenazas, que en febrero pasado presentó el periodista Joel Francisco Mejía Miralda, provocó en los últimos días, intensificación de las amenazas y cierre del programa que manejaba el comunicador social.

Después de una década de haber sido criminalizados por manifestarse contra el rompimiento del orden constitucional en Honduras, la justicia hondureña les ha dictado sobreseimiento definitivo a veinticuatro personas, a las que, en agosto del 2009, el Ministerio Público acusó injustamente y la policía detuvo ilegalmente y los torturó de forma salvaje en los bajos del Congreso Nacional de la República, en los días crudos del golpe de Estado.

Eran las ocho de la mañana del pasado lunes 13 de mayo y San Lorenzo Valle se mostraba caluroso, pero tranquilo, el ir y venir de los transeúntes era normal, cuando de repente, cuatro patrullas repletas de policías, armados hasta los dientes llegaron al palacio de justicia. -Dios Santo ¿qué está pasando?, exclamó nerviosa, una anciana que circulaba por el lugar, –de seguro agarraron algún grande, algún narco, le respondió, un hombre que estaba cerca.