A las dos de la madrugada del lunes 27, los magistrados del TSE dieron a conocer que Nasralla, candidato de la Alianza contra la Dictadura, aventajaba con 93,975 a al Presidente de la República, Juan Orlando Hernández, aspirante a la reelección en representación del derechista, Partido Nacional de Honduras. Sin embargo, los datos no se movieron y fue hasta la una de la tarde del martes 28, que el organismo electoral reinició el procesamiento de las actas, tiempo en el cual circuló innumerable cantidad de denuncias de un posible fraude a través de las redes sociales.
Lentamente el Tribunal de Elecciones fue registrando datos que acortaban la distancia entre Nasralla Y Hernánde. Para la mañana del miércoles 30 de noviembre, los hondureños ya miraban con sorpresa que Nasralla se distanciaba de Hernández con 28mil 400 votos y a las tres de la tarde todavía el candidato de la oposición mantenía un margen a su favor de 24 mil 445 votos.
A las cinco de la tarde, después de una supuesta caída del sistema, que duró casi cuatro horas, la diferencia ya solo era de 3 mil 826. A las 5 y 30 p.m. el sitio web del TSE registraba un empate técnico, y eso encendió las alarmas entre los seguidores de la Alianza y que de manera espontánea salieron a las calles de diferentes ciudades del país a manifestarse en contra del supuesto manoseo de los resultados.
Entre las denuncias circula que por orden de los magistrados, David Matamoros y Saúl Escobar, los técnicos solo están introduciendo datos de las actas que favorecen al candidato nacionalista dejando de lado todas aquellas donde Nasralla resulta ganador y que además estarían duplicando resultados favorables a Hernández.
En las redes sociales también se han denunciado supuestas amenazas de muerte en contra del magistrado Marco Ramiro Lobo, quien el pasado lunes dijo a los medios de comunicación que la ventaja de Nasralla, ya era irreversible, además él ha llamado a que la Alianza defienda su triuenfo porque fue su candidato el que ganó las elecciones.
Ante tal situación, analistas políticos no descartan una descomposición social, sobre todo, porque no es la primera vez en que el Tribunal Supremo Electoral y Juan Orlando Hernández son mencionados por fraudes electorales. En el 2012 Hernández fue acusado por su correligionario y actual vicepresidente de la República, Ricardo Álvarez, de haberle robado la candidatura presidencial en las elecciones internas del Partido Nacional.
Y en el 2013, Partido Libertad y Refundación,(LIBRE), también acusó a ese organismo electoral y al candidato nacionalista, Juan Orlando Hernández de haberse apropiado ilegalmente de la Presidencia de la República.
Se revierten lo datos
A las 5.30 de la mañana de este jueves, según datos dados a conocer por los magistrados del TSE, Juan Orlando Hernández ya aventaja a Nasralla con 22 mil 677 votos, que representan el 0.78%. Las autoridades dicen que ya han procesado 16 mil 90 actas, el 88.76% y que todavía quedan pendientes 2 mil 38, el 11.24%.
El magistrado David Matamoros ha aceptado la existencia de problemas técnicos, pero ante la desconfianza de los hondureños descarta las posibilidades de manoseo de los datos. Entre tanto, su compañero Erick Rodríguez, también cuestionado no solo por la Alianza sino también por el candidato del Partido Liberal, a quien representa, reportó que dos mil actas presentan inconsistencias.
Alianza no acepta los resultados
En conferencia de prensa realizada a las siete de la noche del miércoles, líderes de la Alianza Opositora contra la Dictadura , entre ellos el candidato Nasralla, el coordinador general de dicha alianza , Manuel Zelaya y la candidata a designada, Xiomara Castro, han anunciado que no reconocerán los resultados que favorecen a Juan Orlando Hernández y que de la mano del pueblo defenderán los votos.
En ese mismo evento, Nasralla también denunció haber sido víctima de engaños por parte de la Organización de Estados Americanos,(OEA, con la que firmó un convenio para reconocer los resultados del Tribunal Supremo Electoral, acto que coincidió con la hora en que los datos fueron cambiando a favor de su rival, Juan Orlando Hernández.“Nos toman por idiotas y quieren robarse nuestra victoria”,denunció Nasralla.
El líder de la oposición dejó claro que ante tal engaño deja sin validez el documento que suscribió con la OEA, mismo que también fue rubricado por Juan Orlando Hernández.
Mientras eso ocurría en un hotel de la capital, centenares de manifestantes se tomaron los dos carriles del Bulevar Fuerzas Armadas, frente al Instituto Nacional de Formación Profesional (Infop) para exigirles a las autoridades que respeten la voluntad de los ciudadanos. En ese lugar es donde los técnicos realizan la sistematización de las actas que le servirán de base al TSE para declarar al ganador.
Vale decir que la crisis iniciada con el silencio cómplice de los magistrados del TSE desde la noche del domingo 26 de noviembre de noviembre se agudiza en el correr de las horas y ya se anuncian movilizaciones en todo el país para exigirles a los magistrados del TSE llevar a cabo un conteo transparente.
Entre tanto, los líderes del Partido Nacional también realizan acciones de presión o de respaldo para que el TSE declare como presidente electo al candidato nacionalista, acusado en el Ministerio Público junto a otros dirigentes de ese instituto político de múltiples delitos, entre ellos traición a la patria, abuso de autoridad y fraude. Varios de ellos han sido vinculados con el desfalco al Instituto Hondureño de seguridad Social,(IHSS).
