La madrugada de este 14 de julio de 2022, los jóvenes Said Lobo, hijo del expresidente Lobo Sosa, y su conductor Norlan Enrique Rodríguez, Luis Zelaya, sobrino del ex general Romeo Vásquez, Salomón Vásquez, sobrino del diputado Walter Chávez del Partido Nacional, hombres armados según se deduce de un video circulado en medios de comunicación, los acribillaron a mansalva, con armas de grueso calibre y uniformes supuestamente de la Fuerza Nacional Anti Maras y Pandillas (FNAMP). Los hechores bajaron a los muchachos de sus vehículos cuando salían de una discoteca, ubicada en el Boulevard Morazán de Tegucigalpa. Sus movimientos eran precisos y coordinados, y esto hace suponer que se trataba de una operación muy bien planificada.
La Policía Nacional de Honduras en conferencia, donde se encontraban el Director General Gustavo Sánchez, la Vice Ministra Julissa Villanueva y el Vice Ministro Hugo Suazo, señalaron que los hechos estaban en investigación y que no podían adelantar nada.
La viceministra Villanueva insistió en que Honduras ha vivido en un narco estado el cual debe ser desarticulado, que la intención con este crimen es desestabilizar al gobierno y hacer ver a la policía como inoperante.
La presidenta Xiomara Castro a través de un twitt dijo “Solidaria con ex Presidente Porfirio Lobo, Rosita, y familiares de jóvenes asesinados vilmente. Condeno escuadrones de la muerte que operan hace años con impunidad en Honduras. No descansaremos hasta desmontarlos “.
Este es el comunicado emitido por la Policía Nacional: